En 1960, nuestros mayores emigraron a la ciudad de Santa Coloma de Gramenet (Barcelona) desde Cádiz, con el dolor de dejar su tierra y una parte de los suyos, pero con la ilusión y el propósito de luchar por una nueva vida mejor.

Nosotros los pequeños de la familia por aquel entonces, crecimos y pasamos nuestra infancia alrededor del negocio familiar, un bar de tapas, y cómo no, gaditanas. Hemos crecido y hecho nuestra vida aquí en Barcelona, pero amamos por igual nuestras raíces, raíces a las que nunca renunciaremos y llevamos en la sangre su cultura, sus maneras, sus principios e incluso parte de su habla. Nos sentimos muy orgullosos ya que vivimos de ellas en nuestra vida cotidiana.

Ahora, en honor a nuestros mayores y en homenaje  a todos los gaditanos y al pueblo andaluz en general, traemos al mundo esta GINGinebra“, Herencia de Cádiz… Porque eso es lo que somos: Una “Herencia de Cádiz.”